sábado, julio 02, 2011

Escritor Olvidado

Se sento al escritorio y posó su vaso de whisky sobre él. Aun cuando la penumbra había robado espacio a la luz, se podía advertir el tiempo que había pasado desde la última vez que se había sentado a la mesa. Tomó uno de los papeles entre sus manos y descubrió apesadumbrado que ya habían pasado varios meses desde la última vez que se había sentado ante aquella mesa con un lapicero entre las manos y la esperanza de plasmar sus ideas sobre un papel. No lo entendía, sencillamente algo dentro de él se había ido, igual que el fumador que exhala el humo de la última calada dada a un cigarro, el había escrito aquel último parrafo, que ahora estaba entre sus manos, y había dejado todos sus manuscritos sobre la mesa condenados al olvido.
Sin embargo ahora, delante de ellos, un chispa había vuelto a brotar dentro de él y como el fumador que siente la necesidad imperiosa de encender otro cigarro, él necesitaba rasgar de nuevo el papel. Mientras esas necesidad se apoderaba de él, pensó en colocar todos los papeles pero notó que aquel caos de hojas sobre la mesa no hacía sino avivar su mente. Tomó de nuevo el lapicero entre las manos y comenzó a escribir. Cuanto más escribía más facil le resultaba hilvanar sus ideas, darles la forma que el deseaba sin apenas necesidad de reescribir nada.
Continuó escribiendo toda la noche, cuando el alba comenzaba a asomar su timida tibieza el vaso de whisky se había convertido en plural, las hojas que escribía se seguían amontonando y tenía la necesidad imperiosa de seguir escribiendo, aun cuando cansado y somnoliento su vista se nublaba. Sus manos firmes, seguras de sus trazos, continuaban dando forma al texto hasta que al anochecer lo finalizó. Tomó un último sorbo de whisky y se desplomó sobre el escritorió, dejando su corazón de latir sin llegar a saber que su novela póstuma hubiera sido un exito de no ser por el fuego que esa misma noche arrasó su casa. Tampoco llegó a saber que eso fue lo mejor pues nadie podría haber aguantado la lectura de su novela. Todos hubieran muerto abrumados por la belleza que se escondía entre las páginas manuscritas.

"La gloria o el mérito de algunos hombres es escribir bien; la de otros no escribir nada."(Jean de la Bruyere)

Salu3