miércoles, septiembre 10, 2008

Todos le preguntaban de donde sacaba la inspiración para labrar todos aquellos pequeños cristales que ensartaba en los pendientes y los collares que creaba. pero él nunca contestaba, pues nadie le creería si les contara que el no labraba eso pequeños cristales, que solo se limitaba a recoger las pequeñas lágrimas congeladas que la gente dejaba por ahí tiradas sin ni siquiera preocuparse de que representaban.

"Las lágrimas son la sangre del alma."(San Agustín)

"Debe haber algo extrañamente sagrado en la sal: está en nuestras lágrimas y en el mar."(Khalil Gibran)

Salu3

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