Algunas veces durante las tormentas, los días se tornan especiales. Aparece el sol entre las nubes y, mientras las gotas caen, da forma al arcoiris. Lo dibuja en el aire como un gigantesco cuadro pintado al fresco sobre el cielo. El sol se vuelve artista, vertiendo sus sentimientos en el firmamento, haciendo arte con simples rayos de luz. Cuando esta triste traza su obra sublime, mostrando al mundo su melancolía a traves de un arcoiris en blanco y negro. Cuando esto ocurre, vierte su melancolía en todos los seres vivos, que se unen a él, intentando además, darle consuelo. Tan tristes días influyen en todo, las lagrimas de fuego que derrama provocan cambios en la densidad del asfalto, sus suspiros provocan el viento que mece a las mariposas en su vuelo y sus sueños se pierden en el tiempo como lagrimas en la lluvia. Así van trascurriendo esos días especiales hasta que la noche, extiende su manto. Entonces su corazón, dejando fluir la inspiración, continua su obra en el cielo e ilumina la Luna para que sus obras sean admiradas tanto en los días a los que da forma, como durante las noches que oscurecen el corazón de los niños.
"No perdáis vuestro tiempo ni en llorar el pasado ni en llorar el porvenir. Vivid vuestras horas, vuestros minutos. Las alegrías son como flores que la lluvia mancha y el viento deshoja."(Edmond Gouncourt)
Salu2
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